Zona Huasteca de San Luis Potosi

Hace un par de días escuché que cuando atraviesas un mal momento emocional, la siempre sabia naturaleza te llama y atrae a que acudas a un punto para volver a reencontrarte con tu “yo” y descansar en ella.

Sé que suena bastante descabellado pero me pasó el puente anterior; tomé mi mochila con un par de cambios, saqué un poco de dinero del cajero y me embarqué a la aventura a la Huasteca Potosina, donde el agua, que es mi elemento favorito, limpiaría toda la basura que permití que se adhiriera a mi.Si necesitas comenzar de nuevo, reencontrarte y renovarte, hacer ecoturismo y vivir una aventura única, entonces lo que te urge es escaparte a la Huasteca Potosina. Gracias a los accidentes geográficos naturales disfrutarás de cascadas, ríos, y un clima extremo que te hará sudar hasta los restos de tu última fiestota.

Día 1, entre el silencio y el camino al cielo

Tras 7 horas de viaje desde CDMX llegamos a nuestro primer destino: Manantial de la Media Luna, un área natural protegida ubicada justo en el corazón de San Luis Potosí. A primera vista, el lugar es hermoso, ideal para acampar, hacer ciclismo o buceo, pero su fuerte es el nado sobre las cristalinas y silenciosas aguas del lago.

La verdad es que el chapuzón fue tan reconfortante y delicioso que fue casi como romperse sobre las aguas y dejar salir algo nuevo. El costo es de $40 pesos por persona, más $25 pesos la renta del chaleco.Después nos trasladamos al municipio de Tamasopo y conocimos las cascadas del lugar (con el mismo nombre) y luego visitamos la zona del Puente de Dios. Este último no lo disfrutamos porque la crecida del río no lo permitió. Sin embargo, un guía de la zona nos llevó al ojo de agua y sí, nadar contracorriente es difícil, especialmente si el agua es helada, ahora entiendo a los náufragos del Titanic. El costo para entrar a cada uno de estos lugares fue de $20 pesos. ¡Por favor, no te vayas sin probar el zacahuil de esta población!

Día 2, entre ponerse sensual y ser extremo

Debo aclarar que lo único que, en lo personal, no me gustó de la Huasteca Potosina fue que el calor es INFERNAL (Villahermosa se quedó corto). Pero si sobreviví, seguro cualquiera, especialmente si tienes que remar alrededor de 30 minutos a contracorriente sobre el río Tampaón y gozar del espectáculo natural que la cascada de Tamul (también conocida como ‘La Sonadora’) da al espectador.El ambiente ahí es súper festivo y la afluencia de visitantes es internacional (¡saludos a mis nuevos amigos hindúes!). Pide a tu guía que te lleve a la caverna (no es un cenote) pero como segunda opción en el recorrido. Gastaras por la lancha, el remo, salvavidas y guía cerca de $120 pesos.

El siguiente punto fueron las cascadas de Micos. A simple vista, un lugar cualquiera donde puedes nadar o remar, sin embargo, si como yo buscas aventura y dejar el estrés fuera vas a tener que tomar mucho valor y hacer el recorrido de entre ocho y 10 cascadas donde bien protegido (chaleco y casco) te lanzarás de cada una de ellas que van desde el metro y medio hasta los 8 metros y si eso fuera poco, tendrás que nadar para llegar a los puntos se seguridad. La palabra para describir esto es ¡increíble! El costo de entrada es de $20 pesos y por la experiencia pagaras $120. ¡No te vayas sin lanzarte!